Recientemente ha salido a la luz un incremento de las inspecciones de trabajo en empresas y relacionado con este tema, hoy vamos a hablar de la naturaleza de las franquicias porque algo que tenemos bastante claro, tras muchos años comercializando franquicias, es que mucha gente las identifica como un todo unitario perteneciente a una misma empresa y nada más lejos de la realidad. No hay que olvidar, es más, hay que tener muy presente, que cada franquicia es un negocio propiedad de su dueño en concreto, el franquiciado, con un cif y una personalidad jurídica propia. Esto quiere decir que cada franquiciado es responsable ante una inspección de trabajo, de todas sus actuaciones. Es decir: la limpieza del local, las horas extras de los trabajadores, el trato al público, etc… son temas operativos cuya responsabilidad atañe exclusivamente al franquiciado. Si bien el contrato de franquicia, tiene unas ciertas especialidades que implican que el negocio tiene que funcionar bajo unos parámetros establecidos por la Central, el franquiciado es un empresario individual que responde ante la ley como tal. Esto tiene cosas buenas y cosas malas como es el hecho de que una franquicia funcione bien en Madrid no implica que funcione igual de bien en Logroño. No hay que olvidar que al frente hay una persona distinta en cada caso. Para evitar problemas, desde la Alianza CENTRO FRANQUICIAS & INVERPOINT hacemos hincapié en una selección cuidadosa de franquiciados, en la impartición de una buena formación y en que los mismos comprendan a la perfección sus derechos y obligaciones en relación a la Central franquiciadora y a su propio negocio.
Muy de acuerdo con la información. Ser franquiciado requiere de mucha responsabilidad para salir a delante con el negocio, así como también es importante el contrato firmado al iniciar